SALA PRINCIPAL DEL CONTROL DE MANDO
- Faltan 10 minutos, Señor Presidente.
- Gracias, coronel. Avise al señor Ícaro de que solicito su presencia ipso facto.
- Sí, Señor.
Mientras esperaba Saladino recorrió de nuevo con la mirada la bulliciosa sala repleta de técnicos que trabajaban frenéticamente. En la pared principal una pantalla gigante mostraba la imagen parpadeante de un enorme cohete colocado verticalmente.
“Esto rula” pensó
- Señor, ahora mismo estoy muy liado… - digo el ingeniero asomando la cabeza.
- Entra, entra y siéntate.
Ícaro, estamos apunto de conseguir algo increíble y maravilloso. Las generaciones futuras recordaran este día como el más importante de la historia de la humanidad. Y nosotros, tanto tú como yo, cruzaremos la línea que separa a los mortales de los inmortales.
- Bueno…, no sé…
- Tú confía en mí, amigo. Tengo muchos planes para el futuro y, por supuesto, tú eres una parte esencial. Para empezar, en la próxima legislatura te nombraré vicepresidente y …
- Pero…usted dijo….
- Ya, ya, Ícaro, ya sé que prometí no presentarme a la reelección, pero…¡¡por Dios!! A partir de hoy podré hacer todo lo que quiera, las masas comerán de mi mano, ¡las naciones comerán de mi mano!, nada ni nadie podrá impedir que gobierne el mundo.
- No creo que…
- Hijo mío, veo que todavía estás muy verde en política. Piensa que estamos a punto de dominar el cielo, de dominar las estrellas, de dominar el tiempo y el espacio… te aseguro que no tendremos límite…
- Dos minutos para la cuenta atrás - digo una voz enlatada.
- Vamos, chico. La historia nos espera.
10..., 9..., 8..., 7..., 6..., 5..., 4..., 3..., 2..., 1..., 0...
Un gran estruendo inundó la sala, la imagen del gigantesco cohete en la pantalla principal fue engullida por una nube de humo y fuego. Pero poco a poco empezó a elevarse hacia las estrellas, hacia lo desconocido, dejando atrás los férreos grilletes de la gravedad terrestre.
Saladino sonrió satisfecho.
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Aproximadamente 4 años después…
EN UN PLANETA DESCONOCIDO DEL SISTEMA ESTELAR ALPHA CENTAURI
Miratorio del Monte Venus
-Ghp! Hh shspg mpkhhp khp, p htkph sshhgg gccchp! (Maestro! El gigantoscopio ha detectado un supositorio espacial que ha salido de la esfera azul, y parece que se dirige hacia nosotros!)
- Kphk! pk… (Qué gran noticia! Por fin se han decidido esos pequeños seres unísolares a visitarnos)
- Gccchp… (Tenemos que avisar inmediatamente al Gran Jefe)
- K bbgk… (Por supuesto, se alegrara de saber que su profecía esta a punto de cumplirse. Siempre ha sido partidario de recibir a los unísolares con los tentáculos abiertos. Por cierto, deberías preparar tu deliciosa tarta de guano, seguro qué les encanta!
- Faltan 10 minutos, Señor Presidente.
- Gracias, coronel. Avise al señor Ícaro de que solicito su presencia ipso facto.
- Sí, Señor.
Mientras esperaba Saladino recorrió de nuevo con la mirada la bulliciosa sala repleta de técnicos que trabajaban frenéticamente. En la pared principal una pantalla gigante mostraba la imagen parpadeante de un enorme cohete colocado verticalmente.
“Esto rula” pensó
- Señor, ahora mismo estoy muy liado… - digo el ingeniero asomando la cabeza.
- Entra, entra y siéntate.
Ícaro, estamos apunto de conseguir algo increíble y maravilloso. Las generaciones futuras recordaran este día como el más importante de la historia de la humanidad. Y nosotros, tanto tú como yo, cruzaremos la línea que separa a los mortales de los inmortales.
- Bueno…, no sé…
- Tú confía en mí, amigo. Tengo muchos planes para el futuro y, por supuesto, tú eres una parte esencial. Para empezar, en la próxima legislatura te nombraré vicepresidente y …
- Pero…usted dijo….
- Ya, ya, Ícaro, ya sé que prometí no presentarme a la reelección, pero…¡¡por Dios!! A partir de hoy podré hacer todo lo que quiera, las masas comerán de mi mano, ¡las naciones comerán de mi mano!, nada ni nadie podrá impedir que gobierne el mundo.
- No creo que…
- Hijo mío, veo que todavía estás muy verde en política. Piensa que estamos a punto de dominar el cielo, de dominar las estrellas, de dominar el tiempo y el espacio… te aseguro que no tendremos límite…
- Dos minutos para la cuenta atrás - digo una voz enlatada.
- Vamos, chico. La historia nos espera.
10..., 9..., 8..., 7..., 6..., 5..., 4..., 3..., 2..., 1..., 0...
Un gran estruendo inundó la sala, la imagen del gigantesco cohete en la pantalla principal fue engullida por una nube de humo y fuego. Pero poco a poco empezó a elevarse hacia las estrellas, hacia lo desconocido, dejando atrás los férreos grilletes de la gravedad terrestre.
Saladino sonrió satisfecho.
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Aproximadamente 4 años después…
EN UN PLANETA DESCONOCIDO DEL SISTEMA ESTELAR ALPHA CENTAURI
Miratorio del Monte Venus
-Ghp! Hh shspg mpkhhp khp, p htkph sshhgg gccchp! (Maestro! El gigantoscopio ha detectado un supositorio espacial que ha salido de la esfera azul, y parece que se dirige hacia nosotros!)
- Kphk! pk… (Qué gran noticia! Por fin se han decidido esos pequeños seres unísolares a visitarnos)
- Gccchp… (Tenemos que avisar inmediatamente al Gran Jefe)
- K bbgk… (Por supuesto, se alegrara de saber que su profecía esta a punto de cumplirse. Siempre ha sido partidario de recibir a los unísolares con los tentáculos abiertos. Por cierto, deberías preparar tu deliciosa tarta de guano, seguro qué les encanta!
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