Tweet
y si es por discursos, este fue más conmovedor IMHO. Cuando recibà el ataque traicionero de Prusia y Francia mientras me batÃa en lucha con los Austriacos y Otomanos en el continente 
--------
Welcome to HM Buckingham Palace
Discurso Oficial
Londres. 1 de Enero de 1803.
Conciudadanos,
Dolor y rabia son los sentimientos que se han propagado por todos los rincones de nuestro Imperio, desde los verdes prados del sur de Inglaterra hasta las montañas de Escocia, desde las ciudades libres de las islas y Portugal hasta las cautivas urbes de Italia. Se cierne sobre nostros una nube negra de traición y odio, la cual ha desencadenado la mayor de las tomentas que Gran Bretaña ha debido enfrentar.
A las acciones tomadas hace meses por Austria y el Imperio Otomano, ahora se suman Prusia y Francia, en una alianza cuyo único objetivo es repartirse los territorios Británicos cual salvajes sobre su presa.
Prusia, nación insignificante del centro de Europa, logró atacar por la espalda a tropas que cruzaban su territorio, masacrando a la infanterÃa y capturando unidades de artillerÃa, las cuales ya fueron recuperadas. A las familias de los valientes soldados, que perecieron en tan cobardes ataques, les envÃo todo mi apoyo y el agradecimiento del pueblo británico. Además os informo que hemos lanzado un contra ataque sobre territorio prusiano. El General Robert Craufurd, al mando de la división ligera de caballerÃa escocesa, logró penetrar las defensas de Postdam (Polonia) tomando el control de la ciudad tras la rendición del general de la plaza, Friederich von Bulow. Por otro lado, ha llegado a mi conocimiento los reportes de que el grueso de la división de ejército comandada por el Duque de Wellington ha emprendido viaje al norte, desde las colinas de Praga, para lanzar un ataque a las fuerzas prusianas. Esperamos una dura batalla, ya que sobre Wellington caerá, no sólo el ataque prusiano sino que también el austrÃaco. Nuestras oraciones están con el Duque y sus hombres.
Una cosa está clara, por más que nos cueste sangre, sudor y lágrimas, Prusia pagará caro su osadÃa.
Con respecto a Francia, nación mentirosa, artera y traicionera, solo puedo decir una cosa, jamás olvidaremos su actuar. Raziel Bonaparte, mitómano y bebedor empedernido ha traicionado de la forma más vil y descarada la confianza que tanto el pueblo británico como yo personalmente le hemos entregado. El acuerdo entre nuestras dos naciones, ha sido desahuciado unilateralmente por ParÃs. Nuestro departamento del exterior analizará las fechas de término de dichos acuerdos, ya que al parecer se habÃa firmado un pacto que se mantendrÃa vigente hasta 1808.
Naciones de Europa, preocupense... hoy es Gran Bretaña, mañana será uno de ustedes.
Los ejércitos franceses han cruzado el Canal Inglés y se encuentran a las puertas de Londres y Plymouth. Es este el momento en que más nos necesitamos los unos a los otros. La batalla contra las fuerzas de asalto francesas será ardua, pero venceremos. Llamo a hombres, ancianos, mujeres y niños a tomar las carabinas y a disparar los cañones, hasta que la pólvora se acabe... en ese momento blandirán sus cuchillos y sables y pelearán hasta que los hierros se rompan en mil pedazos... cuando eso ocurra, las piedras, aquellas que dan forma a nuestra amada isla serán las armas de defensa. Porque para ganar la guerra, ustedes deben convertirse en guerra!
Mis palabras no tienen amargura sino decepción. Que sean ellas el castigo moral para los que han traicionado a esta nación y que intentan, por la fuerza de las armas, aplastar a un pueblo amante de la paz. La mayor de nuestras victorias será vencer nuestro propio miedo y enfrentarnos a 4 ejércitos a través de toda Europa... la historia recordará nuestra hazaña.
Pueblo amado, la paz mas desventajosa es mejor que la guerra más justa, pero en órden para ganar dicha paz debemos prevalecer... debemos ponernos de pie una vez más y gritar al mundo entero que el Imperio Británico no se rinde!!!
Que Dios bendiga a esta tierra y a su pueblo. Os dejo, con la esperanza de que más temprano que tarde la victoria nos acompañará. Tengo fé en Britania y en su pueblo. De no ser yo, serán otros los hombres que superarán este momento gris y amargo en el que la traición y la cobardÃa pretenden imponerse.
Para borrar nuestras faltas a los ojos de los hombres son precisos torrentes de sangre; pero ante Dios una sola lágrima basta... y ya hemos derramado demasiadas.
Rule Britania!
Cristián I
Emperador de Gran Bretaña
--------
Welcome to HM Buckingham Palace Discurso Oficial
Londres. 1 de Enero de 1803.
Conciudadanos,
Dolor y rabia son los sentimientos que se han propagado por todos los rincones de nuestro Imperio, desde los verdes prados del sur de Inglaterra hasta las montañas de Escocia, desde las ciudades libres de las islas y Portugal hasta las cautivas urbes de Italia. Se cierne sobre nostros una nube negra de traición y odio, la cual ha desencadenado la mayor de las tomentas que Gran Bretaña ha debido enfrentar.
A las acciones tomadas hace meses por Austria y el Imperio Otomano, ahora se suman Prusia y Francia, en una alianza cuyo único objetivo es repartirse los territorios Británicos cual salvajes sobre su presa.
Prusia, nación insignificante del centro de Europa, logró atacar por la espalda a tropas que cruzaban su territorio, masacrando a la infanterÃa y capturando unidades de artillerÃa, las cuales ya fueron recuperadas. A las familias de los valientes soldados, que perecieron en tan cobardes ataques, les envÃo todo mi apoyo y el agradecimiento del pueblo británico. Además os informo que hemos lanzado un contra ataque sobre territorio prusiano. El General Robert Craufurd, al mando de la división ligera de caballerÃa escocesa, logró penetrar las defensas de Postdam (Polonia) tomando el control de la ciudad tras la rendición del general de la plaza, Friederich von Bulow. Por otro lado, ha llegado a mi conocimiento los reportes de que el grueso de la división de ejército comandada por el Duque de Wellington ha emprendido viaje al norte, desde las colinas de Praga, para lanzar un ataque a las fuerzas prusianas. Esperamos una dura batalla, ya que sobre Wellington caerá, no sólo el ataque prusiano sino que también el austrÃaco. Nuestras oraciones están con el Duque y sus hombres.
Una cosa está clara, por más que nos cueste sangre, sudor y lágrimas, Prusia pagará caro su osadÃa.
Con respecto a Francia, nación mentirosa, artera y traicionera, solo puedo decir una cosa, jamás olvidaremos su actuar. Raziel Bonaparte, mitómano y bebedor empedernido ha traicionado de la forma más vil y descarada la confianza que tanto el pueblo británico como yo personalmente le hemos entregado. El acuerdo entre nuestras dos naciones, ha sido desahuciado unilateralmente por ParÃs. Nuestro departamento del exterior analizará las fechas de término de dichos acuerdos, ya que al parecer se habÃa firmado un pacto que se mantendrÃa vigente hasta 1808.
Naciones de Europa, preocupense... hoy es Gran Bretaña, mañana será uno de ustedes.
Los ejércitos franceses han cruzado el Canal Inglés y se encuentran a las puertas de Londres y Plymouth. Es este el momento en que más nos necesitamos los unos a los otros. La batalla contra las fuerzas de asalto francesas será ardua, pero venceremos. Llamo a hombres, ancianos, mujeres y niños a tomar las carabinas y a disparar los cañones, hasta que la pólvora se acabe... en ese momento blandirán sus cuchillos y sables y pelearán hasta que los hierros se rompan en mil pedazos... cuando eso ocurra, las piedras, aquellas que dan forma a nuestra amada isla serán las armas de defensa. Porque para ganar la guerra, ustedes deben convertirse en guerra!
Mis palabras no tienen amargura sino decepción. Que sean ellas el castigo moral para los que han traicionado a esta nación y que intentan, por la fuerza de las armas, aplastar a un pueblo amante de la paz. La mayor de nuestras victorias será vencer nuestro propio miedo y enfrentarnos a 4 ejércitos a través de toda Europa... la historia recordará nuestra hazaña.
Pueblo amado, la paz mas desventajosa es mejor que la guerra más justa, pero en órden para ganar dicha paz debemos prevalecer... debemos ponernos de pie una vez más y gritar al mundo entero que el Imperio Británico no se rinde!!!
Que Dios bendiga a esta tierra y a su pueblo. Os dejo, con la esperanza de que más temprano que tarde la victoria nos acompañará. Tengo fé en Britania y en su pueblo. De no ser yo, serán otros los hombres que superarán este momento gris y amargo en el que la traición y la cobardÃa pretenden imponerse.
Para borrar nuestras faltas a los ojos de los hombres son precisos torrentes de sangre; pero ante Dios una sola lágrima basta... y ya hemos derramado demasiadas.
Rule Britania!
Cristián I
Emperador de Gran Bretaña
cuando al tratar de subirlos a un transporte no los aceptaba!!! 
Comment