Announcement

Collapse
No announcement yet.

AAR Cuaderno de Bitácora

Collapse
X
 
  • Filter
  • Time
  • Show
Clear All
new posts

  • #31
    .




    La importancia del momento no me permitía tumbarme en la cama y arrepentirme o darme pena. Teníamos graves desperfectos, había caído una carga a menos de 5 metros del la popa del submarino, la sala de torpedos tenía graves daños, y la sala de máquinas, los camarotes de popa así como el flak donde Blaudow cayó también tenían daños, para colmo nos estábamos inundando.
    La integridad del casco quedó al 8%. Se creó de nuevo un equipo de reparaciones, esta vez sería completo y con los más experimentados hombres. Se repararon la mayoría de los sistemas, aunque algunos necesitarían llegar a puerto para ser solventados.
    Cuando cesó de entrar agua y la situación de la sala de torpedos dejó de ser crítica se me informó del mensaje recibido in extremis, había un convoy largo en la casilla vecina.
    Fui al mapa a hacer cálculos, era perfectamente viable intentar una interceptación, incluso podríamos permitirnos el lujo de ir a gran velocidad.

    Esperamos a que anocheciera para salir a la superficie, un 8% es muy poca integridad, deberíamos ser extremadamente sigilosos, del mismo modo habría que desarrollar una estrategia en caso de atacar al convoy, ya que una sola carga podría ser el fin para todos. Además no había que olvidar que sólo teníamos 5 torpedos en proa y 3 en popa.
    Nos dirigimos hacia la casilla vecina a toda marcha, una vez allí, cada 32 kilómetros aproximadamente nos sumergíamos para escuchar y seguíamos una línea recta imaginaria.
    A la cuarta o quinta inmersión al fin se oyó lo que supuestamente podría ser un convoy. Trazamos ruta de interceptación para quedar en un ángulo aceptable y fuimos a su encuentro. El convoy constaba de un número considerable de barcos y desde nuestro punto de vista sólo veíamos un pequeño escolta. La intención era acercarse suficiente como para disparar torpedos desde 4 kilómetros para correr los mínimos riesgos, pero la visibilidad era demasiado mala para sacar soluciones de tiro y nos vimos obligados a avanzar por el lateral del convoy en navegación silenciosa. Cuando teníamos posibilidad de disparo, medio convoy había sobrepasado el punto de interceptación. De los barcos restantes me llamó la atención un T2, decidí mandarle dos especiales para él. Cerca suyo había un mercante pequeño.

    - Udo, profundidad 11 metros, velocidad lenta, abra los tubos.
    - torpedo 1 fuego!
    - torpedo 2 fuego!
    - 180 grados a estribor! Velocidad estandar, Udo, torpedo 5 preparado para impacto a profundidad 6 y velocidad rápida.

    En cuanto dimos la vuelta apunté al pequeño mercante y disparamos el torpedo de popa mientras ya nos alejábamos del convoy.











    Bum!! Bum!!! Bum!!! Los tres torpedos estallaron. Por el periscopio vi como el mercante se hundió rápido, al tanker le costó primero un buen incendio. El escolta ni nos olió.

    Había salido perfecto. ¿por qué no repetirlo? Podríamos hacer un ataque rápido con 3 torpedos de proa y uno de popa.

    Mandé mantener un rumbo cercano a 90 grados respecto al convoy para ganar distancia rápidamente, desde lo lejos el sonarista confirmó el rumbo actual del convoy y trazamos un nuevo punto de interceptación en el cual nosotros llegaríamos 2 horas antes, así podríamos movernos a toda marcha sin ser oídos y en caso de que variaran la ruta podríamos interceptarlos de nuevo.

    Llegamos al nuevo punto y esperamos nuestra presa. Media hora antes de lo esperado ya se les oía acercar, más tarde el horizonte se dibujó de débiles tonalidades de negros, había humaredas como setas, habría por lo menos una docena de barcos.

    - Barco de guerra avistado!! A 60 grados!- gritó Otto

    Efectivamente, abriendo paso estaba un V&W Destroyer, mandé navegación silenciosa y avante lento para intentar afinar el lugar ideal para el ataque.

    El tiempo se dilata, el destructor se mueve haciendo eses y desde nuestro punto de vista se acerca y se aleja, y parece que nunca llegará. Empiezo a identificar los barcos, hay varios C2, un T3, y un número similar de pequeños mercantes y mercantes costeros.
    Decidí elegir el blanco final cuando viera las posibles soluciones de tiro, ahora había que vigilar al destructor. Con el pasar de los minutos se aprecia su movimiento, y nuestra posición tiene muchos números de interponerse con él.

    - Atrás despacio- susurré.

    Las eses del destructor se dibujaban por donde estábamos, pero ahora las habíamos esquivado y teníamos delante al destructor a poco más de 500 metros, la tentación fue brutal, y... caí en ella.

    - Torpedo uno fuego!!

    El destructor oyó o vio el torpedo, maniobró para esquivarlo, y lo consiguió. Las cosas se ponían feas para nosotros. Ahora tocaba su turno, y por poco que acertara ganaría la batalla.

    Nos buscaba con los faros, sabía que estábamos a estribor pero no sabía exactamente donde. Tuve la oportunidad de virar a babor para alejarnos en dirección contraria cruzando su estela, pero de nuevo la adrenalina tomó posesión de mi cuerpo y mandé seguir paralelos al destructor a su misma velocidad.
    En ese momento el instinto me decía que si el destructor viraba hacia mi, su radio de giro me dejaría en el centro de su circunferencia de viraje, imbatible, y necesitaría dar una vuelta completa para poder iniciar una persecución. De echo el instinto nunca dice nada más que “si, bien, por aquí si” y ojalá no cambie de opinión, pero yo tenía la corazonada que era cierto.

    La curiosidad mató al gato y en mi caso provocó que localizaran el periscopio. Del destructor empezó un festival pirotécnico poco amistoso y con exceso de espectacularidad.











    Bajé el periscopio para que no me lo dañaran, y cesaron los disparos. Lo subí un poco y comprobé que iba a pasar exactamente lo esperado. El destructor estaba virando, craso error, yo no estaba dispuesto a permitirle dar una vuelta entera para perseguirme.

    - Paren máquinas!

    Si perdíamos velocidad, tal vez el destructor al cruzar nuestro rumbo estuviera a más de 300 metros.

    - Udo, torpedo a velocidad rápida y dele un buen beso, no nos puede fallar.

    344 metros, increíblemente genial.

    - Fuego!!!

    El destructor no tuvo tiempo a reaccionar y se comió el torpedo por la zona de proa, no parecía tener graves daños visibles, pero la vía de agua que debía tener en lo más profundo de su casco no le permitió recorrer más de 200 metros.











    -Jajajajajaja!!!! Se me dan bien los destructores!! Sí señor!!

    Ahora podría poner mi atención a los cargueros. Todas esas humaredas ya tenían cuerpo y estaban deliciosamente cercanas.

    - Barco de guerra a 45 grados señor!!!- Zinke últimamente sólo trae malas noticias.

    Esta vez se trataba de un Hunt I Destroyer y sólo tenía un torpedo en cada esquina.
    El destructor tenía un rumbo abierto hacia el exterior del convoy, alejándose del submarino. Entre él y nosotros... un C2. Con los torpedos podría hacer poca cosa y en caso de atacar a los mercantes quería tener alguno para defenderme del escolta.

    - Avante lento, a superficie! Rápido!

    Georg prepárese para subir al puente, es su oportunidad con el cañón, hunda al C2 antes de que el destructor de la vuelta. El mercante nos escudaba y nos escondería durante un rato, incluso si consiguiéramos estar suficientemente cerca, al hundirlo podríamos sumergirnos justo a su lado y ser como un pez buscando refugio en un arrecife.

    Las explosiones de los proyectiles contra el mercante empezaron a oírse, yo supervisaba todo desde el periscopio de ataque. Teníamos al mercante a menos de 100 metros, todos los proyectiles daban en el blanco.

    - Georg, apunte a su línea de flotación, no hay tiempo que perder.

    Con un poco de suerte el escolta se desorientaría y tendríamos tiempo de sobras. Giré el periscopio, se acercaban dos C2 más en fila, ¿sería demasiado osado disparar al siguiente a su proa en cuanto termináramos con el actual? volví a poner el periscopio en su posición inicial para ver el trabajo de Georg, y de repente se hizo la luz. Apenas veía nada, ¿era eso el dichoso túnel que termina en el paraíso más puro de todos los paraísos? No, el viaje aún no había empezado para nosotros, pero si no actuábamos rápido el Hunt I que se venía a toda máquina directo a nosotros lo iniciaría.

    Maldita paradoja temporal, el tiempo que se había dilatado mientras acechábamos al convoy ahora se había comprimido severamente.

    Había que pensar rápido.
    Situación: el mercante aún no se hunde y el destructor nos quiere embestir.
    Alternativas: Sumergirse YA.
    Inconvenientes: nos quedamos sin hundir al mercante, pero lo peor es que tenemos al destructor a 20 grados y avanzamos a 1 nudo. Si nos sumergimos a esta velocidad nos partirá en dos, si aceleramos acortaremos el tiempo de la embestida pero tal vez lo consigamos... aunque si lo conseguimos... pasaremos por debajo suyo y sufriremos las cargas. Solo una, una y todo termina.

    - Georg!! Quiero que mire ese C2 y no vea nada mas hasta que se vaya al fondo!!!
    - Udo, prepare nuestro último torpedo de proa a velocidad rápida e impacto a 6 metros!!!

    Era una locura, es más, era la mayor locura que nunca se podría intentar. Disparar en superficie a un destructor que viene de cara a toda velocidad y que se encuentra ya a un kilómetro de distancia.

    Mientras Udo se encargaba del torpedo yo miraba por el periscopio preparando la trayectoria. Era inútil buscar nada, el gran faro me deslumbraba por completo, empecé a oír como se cortaba el aire, nos estaban disparando, eran proyectiles de calibre pequeño, pero no se les podía ver venir.

    - Torpedo listo señor!! Y tubo abierto!
    Apunté justo en ese faro blanco y di la orden de disparar.

    Fue increíble ver ese impacto, me quedé boquiabierto mientras el cielo se hizo de día por unos segundos, el destructor en llamas siguió su curso y muy cerca de nosotros se desplomó hacia su costado. Nos libramos por los pelos.











    Fuiiiiiiisht..... fuiiiiiiisht..... fuiiiiiiiisht seguían pasando cerca proyectiles, ahora al no estar deslumbrado pude ver que provenían de algún lugar desde popa. Había una patrullera a 4 mil metros abriendo fuego contra nosotros.

    - 30 grados a babor!!

    Lentamente encaramos el culo hacia él, el maldito C2 se resistía a hundirse, y de allí no nos iríamos sin bajarlo. Ponernos a 180 grados del rastreador disminuiría nuestro perfil, algo que sería de agradecer, y de paso intentaríamos repetir la hazaña.

    - Torpedo 5 fuego!!!











    El torpedo salió disparado, empezó la cuenta atrás en el cronómetro y después de un tercio de su recorrido, al este del rastreador se encendió otro faro.

    -Oh Dios, otro escolta no, ¿porqué te empeñas en traernos contigo?

    Esta vez el no hundiríamos al enemigo con un golpe frontal.

    Era preocupante, no nos quedaban torpedos a proa, acabábamos de disparar el torpedo de reserva de popa, teníamos el casco al 8% con lo que una inmersión mas allá de profundidad de periscopio era una inmersión de alto riesgo, y teníamos a dos rastreadores persiguiéndonos y estando a tiro.

    - Señor!! El C2 se hunde!!- gritó Georg
    - Al fin!! Georg apunte a los rastreadores y devuélvales el fuego!
    - Negativo señor, no están a tiro.

    Como no, siempre tienen que haber inconvenientes, el cañón de cubierta es ciego de los 160 a 200 grados por lo menos

    - Avante toda!! 90 grados a estribor!!

    Los escoltas aún estaban lejos, y si, eran 2 y nosotros solo uno y mal herido, pero tras ellos había un convoy esperando. Habíamos luchado por él y no nos íbamos a humillar. Lo peor ya había pasado y algo me decía que tendríamos más posibilidades de sobrevivir si plantábamos cara que si intentábamos huir.

    El submarino empezó a virar, y los rastreadores cada vez se acercaban más, los disparos venían desde dos ángulos distintos y cada vez pasaban más cerca del submarino.

    - Georg apunte a sus cañones y puestos de mando!

    Dentro del submarino la expectación había crecido sobremanera, los ojos de todos los marineros se clavaban en mi cabeza. Había miedo.

    Georg consiguió darle a uno de los rastreadores, causó un incendio pero seguía disparando y avanzando.

    - Georg no se deje llevar por el echo que sean dos, no dispare al otro hasta que el más cercano se hunda.

    Seguimos intercambiando disparos, la proporción era 2 a 1 pero la experiencia de mi tirador nos daba ventaja.
    Uno de nuestros proyectiles impactó de lleno en las dependencias del rastreador y su faro dejó de iluminarnos, Georg movió el cañón hacia el otro.

    - Yo no veo que se hunda!! DISPARE AL PRIMERO!!! ES UNA ORDEN!!!

    Mi orden estaba justificada por una de mis propias citas preferidas:
    “Cuando los delfines están hambrientos y se encuentran un banco de atunes, a veces la codicia hace que ataquen al banco entero y se queden sin presa.
    El delfín que no ve un banco, si no un sólo atún, será el que se vaya con el estómago lleno.”

    Georg siguió disparando al primer rastreador, y poco después una explosión terminó con él.










    Ahora podríamos destinar todo el fuego al otro rastreador, pero éste no fue ni mucho menos tan buen rival como el otro, fue alcanzado varias veces seguidas en un lateral, con menos de 10 impactos ardía como una cerilla.
    El ambiente estaba cargado de humo, en pocos minutos habían ardido 5 barcos, y disparado multitud de proyectiles. Dentro del submarino todos estábamos jubilosos.











    - Zinke rastree en busca de barcos de guerra.
    - Georg!!
    - ¿Si señor?
    - Póngase el babero y no deje un barco sin agujerear.

    Empezó un festival, más bien parecía una bacanal; excitados y deseosos repartimos lo mejor que llevábamos dentro entre todas las naves, ellas se derretían ante nuestra ardiente pasión. Se fueron al fondo primero los dos C2 que seguían a nuestra primera víctima, luego nos fuimos a por el tanker, les siguieron los pequeños mercantes y al final de la lista quedaron los mercantes costeros.











    Tuvimos que racionar la munición, íbamos escasos de proyectiles perforantes y los repartimos entre los barcos mas grandes, cuando solo quedaban 2 mercantes costeros nos quedamos sin munición explosiva. El mercante al que atacábamos estaba ya en llamas, le disparamos bengalas desde muy cerca para causarle más daños y usamos el flak ya que no lo usaríamos más, el mercante agonizaba pero aguantaba, así que navegamos a su lado esperando que el tiempo le diera sentencia.

    Quedaba un testigo, un mercante solitario, superviviente de una masacre. Salió en masa de Inglaterra y llegaría solano a América.
    La idea me provocaba mucha morbosidad, dejar a un testigo que contara nuestra hazaña nos inmortalizaría y además daría un buen golpe a la moral del enemigo, pero me dejaba un mal gusto de boca... era dejar algo a medio terminar, si fuera por voluntad sería malvadamente genial, pero nuestra situación era por forzosa necesidad, nuestro cañón no tenía munición, el flak tampoco, los torpedos habían sido todos disparados, estábamos desarmados. ¿todos? No! Aún teníamos el torpedo de popa exterior!

    Ahora sí había las condiciones adecuadas para poder malvadamente perdonarle la vida, pero ¡que rayos! ¿qué mejor que te inmortalice tu propio pueblo? ¡qué les den a los ingleses!

    Navegamos tranquilamente siguiendo al mercante que atemorizado hacía eses, alargamos su sufrimiento durante dos horas para cargar el torpedo. En ese momento estábamos listos y dispuestos a ser su verdugo, con avante máximo nos avanzamos en su ruta mientras virábamos para conseguir una distancia lateral de unos 400 metros. Una vez allí terminamos la faena.











    Quince minutos después navegábamos de nuevo a 10 nudos.
    Mandamos un parte de la batalla por radio, acabábamos de hundir 14 mercantes y 4 barcos de guerra con un tonelaje total de casi 64 mil toneladas.
    La integridad del casco había bajado al 6%
    La BdU nos informó que durante el día anterior habían interceptado un SOS enemigo, al parecer, cuando el ataque aéreo alcanzamos a un segundo Hurrikane que no consiguió regresar. A Blaudow le hubiera encantado saberlo.
    Se nos mandó regresar a la base, pero aún teníamos algo que resolver antes.

    ¿Quieres conocer a mi tía Isa?

    Comment


    • #32
      ¿Quién es Lili Marleen?


      Por primera vez una noticia de tanta importancia no necesitaba ser difundida mediante boca a boca, todos sabían que no teníamos munición de ningún tipo, así pues pronto todos volverían a casa.
      El más perjudicado de todo fue el operador de radio. Hacía unos días, en una visita a la sala de torpedos de popa vio como su tabaco caía al suelo encharcado. Ahora se dedicaba a contar los mensajes de radio en los camarotes, y siempre a cambio de algún cigarrillo, pero esta vez nadie desembucharía un pitillo para saber la opinión de la BdU.


      Tardaríamos días en llegar a casa, lamentablemente no era viable llevar el cuerpo de Blaudow a casa para que los suyos le dieran sepultura, así que habría que enterrarlo en el mar, al fin y al cabo era marinero. Creí bonito que descansara en el lugar donde cayeron él y sus enemigos derrotados.

      Un vez en la zona se ordenó a la tripulación ponerse de gala y formar en escrupuloso silencio en cubierta.
      Blaudow estaba lo mejor arreglado posible, el médico le había limpiado las heridas y dejado buena apariencia, él también iba de gala para despedirse de nosotros.

      Paramos máquinas e hicimos un minuto de silencio para recordarle, acto seguido como capitán me vi obligado a decir unas palabras:

      He aquí el cuerpo de Blaudow, yace delante nuestro un marinero, un buen marinero, antes que eso era patriota, y por encima de todo, un compañero.
      Dio todo lo que su deber le exigía, y se nos fue derribando dos aparatos enemigos, Dios sabe que con un puñado de Blaudows ganaríamos la guerra.

      ... ... ...

      Para alguno de vosotros su pérdida es una pena...
      Para otros es un orgullo haber compartido todo, con un marinero que tuvo el más alto de los honores, dar su vida por la patria...
      Para mi, que se haya ido estando bajo mi mando es una desgracia y no se si podré perdonarme que se fuera en mi lugar....
      Pero... las verdaderas víctimas aún no saben que nunca más lo volverán a ver, sentir ni oír.
      Hermanos... hermanas... padres... pareja y amigos... Todos aquellos que aguardan su llegada a puerto pagarán el más alto precio de la guerra.


      Dios, Blaudow cruzó las aguas con más valentía que tu propio hijo, acógelo entonces como se merece.

      amén

      La tripulación levantó el brazo, y con voz claramente emocionada se le despidió cantando la única canción que todos se sabían y que Blaudow adoraba:



      Bajo la linterna, frente a mi cuartel
      Se que tu me esperas, mi dulce amada bien.
      Y tu corazón al susurrar,
      bajo el farol, latiendo está.
      Lili, mi dulce bien
      eres tu, Lili Marleen.

      Cuando llega un parte y debo marchar
      sin saber querida si voy a regresar
      se que me esperas siempre fiel,
      bajo el farol, frente al cuartel
      Lili, mi luz de fe
      eres tu, Lili Marleen

      Si en el frente me hallo, lejos, ay! de ti
      oigo que tus pasos se acercan junto a mi.
      Y se que allá me esperas tu,
      junto al farol, plena de luz
      Lili mi dulce bien
      eres tu, Lili Marleen



      El odio estaba presente en mis palabras, al Führer ni lo mencioné, y a Dios sólo le reproché y exigí.


      En este momento la misión se daba por cumplida en todos sus aspectos y poníamos rumbo a casa, solo quedaba un obstáculo, pasar de nuevo por delante de Scapa Flow.

      El oficial de navegación quería comentar algo
      - ¿Señor, porque no esquivamos el estrecho bordeando la isla por el norte?
      La verdad es que ahorrarnos ese paso estaría muy bien pero...
      - Hay un problema, esas aguas son demasiado poco profundas, si somos detectados estaremos perdidos.
      - No olvide señor que tenemos el casco sin apenas aguante, si conseguimos navegar a profundidad de periscopio ya será un gran logro, la profundidad extra en Pentland no es un factor aprovechable, y en caso de producirse una desgracia mejor 20 metros que 100.
      - tiene usted razón, pero no me convence su punto de vista. Que no podamos sumergirnos a mas de 15 metros no significa que nuestro enemigo tenga que saberlo, podrían pasar por encima nuestro y tirar cargas a 40 metros de profundidad, también hay que tener presente que la carga que explotó en la popa dañó los sistemas de dirección y nos cuesta una barbaridad maniobrar. Además, si hay un desastre... cuanto más profundo vaya el submarino mejor, ¿o desearía salvar la vida entregando nuestra tecnología al enemigo? Pasaremos por el estrecho, ya está decidido.

      Mandé poner rumbo a Scapa a velocidad lenta para ahorrar combustible y en modo de recarga de baterías











      Llegamos a las cercanías del estrecho por la mañana, así que deberíamos esperar a que anocheciera. Nos sumergimos a profundidad de periscopio y a velocidad lenta buscamos las cercanías de una costa desde donde durante el resto del día solo necesitaríamos subir un par de segundos el periscopio para observar la zona de mar.

      - Barcos de guerra a 350 grados señor! Distancia larga.- gritó Zinke mientras nos dirigíamos a la costa.
      Bueno, era normal que se patrullara la zona, no había que ponerse nervioso. Con el periscopio confirmé la existencia de dos barcos de guerra.












      Bajé un poco el periscopio y los seguí para cuidar que no cambiaran inesperadamente el rumbo. Pero de repente oí de lejos un zumbido de motor, levanté la lente, pero no vi ningún avión. Volví a mirar los barcos y al poco rato se encararon a nosotros. Oh no! El avión debe haber visto la estela!!

      -avante toda!

      Hay que ganar distancia, ellos se dirigen a una posición aproximada, debemos “desaproximarla” al máximo, nuestro sub es una olla a presión que no deja de silbar y en cualquier momento puede estallar.
      Los motores aumentaron la potencia y se les oía severamente, imaginé las burbujas creadas en las hélices, por los cambios brutales de presión, como rosarios de burbujitas que suben y espero que lleven a Dios nuestras oraciones. Si, se que en los momentos duros vuelvo a ser un humilde siervo de Dios, pero él me conoce y le pido además que también me perdone por esto.

      Por suerte o por ayuda divina, los destructores ingleses pasaron a varios cientos de metros de nosotros. Paradojas de la guerra me permitieron observar la belleza de la fusión entre mi cazador y la naturaleza.











      Los pings de los dos ASDIC empezaron a rebotar por el sub, eran lejanos, seguramente inofensivos, pero el temor de que un solo eco nos delatara ponía los pelos de punta.
      Poco a poco nos fuimos alejando y a varios kilómetros más allá paramos máquinas, bajé el periscopio, mandé silencio absoluto y dejamos pasar las horas, fue un día muy amargo, nadie era capaz de intentar mantener ninguna actividad rutinaria, simplemente esperar, simplemente contar el número de inspiraciones-expiraciones, simplemente mirar al compañero que tienes delante sin verle realmente, simplemente rezar, soñar o tatarear...
      Yo me preguntaba por Lili Marleen, ¿quién es Lili Marleen?
      Para mi... para mi un día fue una hermosa mujer de vestido rojo que me hizo desear, una mujer de las que te nublan los pensamientos, te inundan y no te dejan, y terminas por recordar y desgastar el momento en que os conocisteis, y luego vivir y revivir el momento del reencuentro especulando sobre como será.
      Cuando las cosas se empezaron a poner feas durante la patrulla, Lili Marleen se convirtió en mi madre, mi querida mamá, su amor verdadero y más intenso que el anterior, el único capaz de apagar mis miedos y... gratuito, a menudo sin recompensa.
      Después de vivir el horror no creo que sea una canción de amor, nadie librando una guerra puede sentir esa clase de amor. No hay bella mujer, no hay nadie que nos espera. Al partir dejamos nuestras vidas en el puerto, aquí sólo hay marineros, no hay nadie esperando nuestro regreso, somos nosotros quienes esperan regresar, pues en el puerto no hay nadie, solo nosotros mismos.


      Oscureció, una enorme luna casi llena iluminaba el estrecho, pero era la recta final, acepté el reto. Subí periscopio, y a velocidad lenta nos dispusimos a cruzar. A ratos Fritz tenía que sustituirme, pues parecía que perdía la cabeza debido al cansancio y al esfuerzo de buscar humaredas negras sobre fondo negro. Cada vez que percibimos una nos alejábamos cuanto pudiéramos para no correr riesgo alguno y al fin... salimos del estrecho. Pasamos medio día más en inmersión, luego salimos para renovar el aire y cargar un poco las baterías antes de volver a inmersión. En ese momento me acosté, llevaba dos días sin pegar ojo, Fritz tenía ordenes de salir a superficie durante la noche.

      - Capitán!! Capitán!! Un barco noruego!! Un barco noruego!!- vino a despertarme uno de los chicos. No se cuantas horas llevaba urmiendo...
      - Deja dormir al capitán! ¿qué mas da un maldito barco Noruego?- le reprochó un compañero
      Sonreí y sentí una profunda paz interior, estábamos a medio camino y casi fuera de peligro, por lo menos los aviones no tenían suficiente alcance.

      Dicen que las vueltas se hacen largas, a mi, recorrer esos miles de kilómetros se me hizo muy corto, seguro que las ansias de llegar ayudaron. Esas mismas ansias casi me desprenden unas lágrimas al ver los faros de Kiel. Suerte que no tenemos la orquestra de Wilhemshaven, habría sido vergonzoso que todos vieran que soy un hombre sensible.

      Mi tripulación formó por última vez ya en tierra firme, allí les felicité uno por uno.
      Comandancia me “ofreció” la responsabilidad de recompensar con un número irrisorio de medallas, tocaba a un octavo de medalla por cabeza, pero como serían capaces de fusilarme en caso de partirlas, me vi obligado a discriminar a ciertos Héroes en pro de otros Héroes, algo denigrante cuando los culos de mis superiores están tan llenos de medallas que si los llevaran desnudos no dejarían un solo pelo al aire.




      ¿Saben cual es la mejor de todas nuestras penas pasadas?

      Haber sufrido tanto con un submarino solo al 6% de integridad...

      ... se pasaran lo que queda de mes para repararlo...

      ... nadie más que mis Compañeros se merece tantos días de permiso.




      .

      ¿Quieres conocer a mi tía Isa?

      Comment


      • #33
        Arsen continuó al mando de su U-Boot con el resto de la tripulación. Interpretó que Lili Marleen era una simple personificación, representaba la esperanza. Esto le dio fuerzas y motivación para seguir cuando se dio cuenta que ningún Reich merecía ese precio.
        Arsen hizo de la canción el himno de su submarino.

        Fritz se convirtió en la mano derecha de Arsen, y empezaba a cultivarse un nombre, su sueño de capitanear su propio Uboot cada vez estaba más cerca.

        Zinke fue el miembro más destacado de la tripulación, se convirtió en el único sonarista de confianza del capitán y durante los siguientes meses instruyó a nuevos marineros a usar el hidrófono y distinguir los sonidos.

        La tripulación en general fue ampliamente condecorada, y el prestigio adquirido permitía obtener mejoras de todo tipo para sacar ventaja en el campo de batalla.



        El 17 de Mayo de 1940 se recibió un mensaje informando que se encontraban en el Cabo Wrath y se dirigían a casa vía estrecho de Pentland (Scapa Flow),




        Nunca se supo más de ellos.






        Este AAR está dedicado
        a los 52 hombres ficticios que perdieron la vida en la historia que nos ha acompañado,
        a los miles de marineros de Uboots que nunca regresaron,
        a las victimas de dichos Uboots, militares y civiles del bando aliado,
        y sobretodo
        a los lectores del AAR
        y especial gratitud a los que postearon y animaron a que consiguiera terminarlo.




        .

        ¿Quieres conocer a mi tía Isa?

        Comment


        • #34
          Bravo!!!! Bravo!!!!! mucho maestro!!!!
          solo una pregunta que deseo sea aclarada.
          ¿quién es Lili Marleen?

          Al menos postea la foto de ella
          BUSCANDO EL PUNTO G DE LA MUJER Proud member of the Team Latin Lover
          Para que beber y conducir, si puedes fumar y volar!!!! @.@-~

          Comment


          • #35
            De mayor quiero ser como Arsen
            El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños.
            - Eleanor Roosevelt

            Comment


            • #36
              Originally posted by Chingasatt
              Bravo!!!! Bravo!!!!! mucho maestro!!!!
              solo una pregunta que deseo sea aclarada.
              ¿quién es Lili Marleen?

              Al menos postea la foto de ella
              Lamentablemente no te puedo postear na foto pues Lili Marleen no existe, aunque si quienes la cantaban.


              Lale Andersen



              Marlene Dietrich


              y a la pregunta ¿Quien es Lili Marleen?, puedo pegarte lo que dice la wikipedia.


              "Lilí Marleen" es una famosa canción alemana, popularizada durante la Segunda Guerra Mundial. Ha sido traducida a muchos idiomas, transformándose en algunos países en marcha militar.

              El soldado alemán Hans Leip, al ser trasladado durante la Primera Guerra Mundial al frente ruso, compuso una poesía en la que recordaba a su novia de cómo se despedían ambos debajo de un farol junto al portalón del cuartel. El nombre compuesto Lilí Marleen lo obtuvo empleando el nombre de su novia Lilí y el de la novia Marleen de su amigo.

              El compositor alemán Norbert Schultze puso música a esta poesía en 1938. La canción, aunque cantada por la ya famosa Lale Andersen, no tuvo éxito. Pero en 1940, comenzada la Segunda Guerra Mundial, un suboficial de una compañia alemana de reconocimiento acorazado tenía el disco y lo puso un día en una reunión informal en el cuartel. La canción, desconocida por los oyentes, les gustó tanto que la adoptaron como canción de la compañía. La compañía fue enviada en la primavera de 1941 al frente del norte de África formando parte del Afrika Korps pero uno de los suboficiales -Karl Heinz Reintgen- había sido trasladado antes a Belgrado para hacerse cargo de la emisora militar de esta ciudad. Llevaba consigo el disco de Lilí Marleen. Allí lo puso un día, dedicándolo a sus compañeros que se encontraban en el desierto norteafricano. La emisión tuvo un gran éxito y desde todos los frentes llegaron peticiones para que se volviese a poner la canción, de modo que la emisora militar de Belgrado, en adelante la emitía todos los días a las 21 horas 57 minutos como cierre de emisión.

              Grande fue la sorpresa de los soldados alemanes cuando empezaron a hacer prisioneros que también habían oido la canción de Lilí Marleen y la sabían tararear. Pronto hubo versiones de texto para los combatientes de todas las nacionalidades, convirtiéndose en la canción de guerra más popular hasta hoy conocida.

              Intérpretes principales durante la Segunda Guerra Mundial fueron Lale Andersen, Vera Lynn y Marlene Dietrich.

              ¿Por qué fue tan apreciada la canción por los soldados de aquella guerra? Fue Lale Andersen la que da la respuesta más acertada: ¿Acaso puede el viento explicar cómo se convirtió en tempestad?

              La canción Lilí Marleen, es un pedacito de historia militar, dice Paul Carell.

              La cancion en su lengua materna se puede escuchar en un capítulo de este mismo AAR, cuando el capitán Arsen la pone en el gramófono del submarino.
              Luego la canción fue traducida a una treintena de lenguas

              He sacado este caco de una web:
              Lili, Lili. “Vor der Kaserne/ Vor dem groBen Tor...”, escuchaban los alemanes; “Dame una rosa y estréchala sobre mi corazón”, cantaban los italianos; los franceses recordaban “Delante del cuartel, cuando el día se va...”; y los japoneses, heroicos y suicidas, “Por ti quiero luchar, morir, resucitar...”.

              La version Chilena es con la que despidieron al compañero caido. La versión Española es:

              Al salir de España
              Sola se quedó,
              llorando mi marcha
              La niña de mi amor.
              Cuando partía el tren de allí
              Le dijo así mi corazón:
              Me voy pensando en ti,
              Adiós, Lili Marlen.

              Aunque la distancia
              Vive entre los dos,
              Yo siempre estoy cerca
              De tu claro sol,
              Pues cuando tu carta llega a mí,
              Se alegra así mi corazón,
              Que sólo pienso en ti,
              Soñando con tu amor.

              Cuando vuelva a España
              Con mi División
              Llenará de flores
              Mi niña su balcón.
              Yo seré entonces tan feliz
              Que no sabré mas que decir:
              Mi amor, Lili Marlen,
              Mi amor es para ti.


              En esta página está traducida a varias lenguas más.

              La traducción es tal, que ni el nombre de la misteriosa chica se ha mantenido. Lili Marleen es el original, nosotros hemos castellanizado el "apellido" a Merlen, los ingleses la llaman Marlene, los Franceses Lily, y los que se llevan la palma son los Húngaros que han tenido la osadía de llamarla Márikám
              Last edited by Arsen; July 29, 2005, 20:49.

              ¿Quieres conocer a mi tía Isa?

              Comment

              Working...
              X