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De pequeño mi abuelo me sentaba en un pequeño trono cerca del fuego y pasaba horas contándome historias de cuando era un jovenzuelo.
Él era un chico preso de una situación familiar desfavorable. Sus padres construyeron su cabaña lo más alejado del pueblo. Los niños apenas le veían y cuando eso pasaba lo “bullyeaban”.
Así pues Kosey, que era como se llamaba mi abuelo, pasó su primera década persiguiendo gallinas por el campo de lino. En cuanto empezó a madurar, dejó de alborotar aves, y como la sociedad no lo aceptaba, decidió entablar amistad con la naturaleza.
Kosey pasaba muchas horas en el desierto, allí no había aldeanos cazando gacelas, porque éstas no se adentraban en él, tampoco había frutos que recoger ni agua que beber. Kosey allí era el único, Kosey era el Rey.
Tantas horas solitarias le dieron muchos pensamientos a desarrollar. Él desde lo lejos contemplaba a los crueles humanos en sus tareas cuotidianas, ellos eran fuertes pero su mente daba poco de si. Habían asentado sus poblados cerca de los campos de lino en vez de lugares abundantes en comida. Él creía que podría haber planeado mejor esas aldeas, le gustaba definir las zonas, por ejemplo llamaba Tierra Negra a la zona que el Nilo periódicamente inundaba y al retirarse dejaba teñida. Las tierras que no alcanzaba el agua las llamaba Tierra Roja, y era donde se debía asentar cualquier humano, pero habría que buscar fuentes próximas de granados, olivos y palmeras datileras, el lino sería una necesidad secundaria, y el agua se podría transportar con cerámicas adecuadas.
Se pasaba el día contemplando el valle y cuando la noche caía, a medio camino de casa había un lugar con hierba fresca donde tumbarse a contemplar las estrellas. Kosey era un soñador, dibujaba todo tipo de formas y figuras en el cielo nocturno, sin embargo no siempre podía dibujar con su estrella favorita, la más brillante de todas, un dibujo canino, ya que esa hermosa estrella sólo se dejaba ver ciertos períodos de tiempo. Durante 4 años no cayó en la cuenta de que cuando su estrella se asomaba por el horizonte, empezaban las inundaciones del Nilo. El 5º año lo corroboró, el 6º año trabajó una parcela de tierra negra y sembró trigo. El pobre Kosey fue el hazmerreír de toda la ribera del Nilo, todos sabían que cualquier día el Nilo se cobraría su tributo y Kosey moriría de hambre al no haber recolectado suficiente. Y llegó el día en que Sirius ascendió, ese día Kosey cosechó y llenó 15 sacos de trigo. El pueblo envidioso creyó en una sonrisa de la fortuna.
Las aguas bajaron, y Kosey trabajó 2 parcelas. A sus 17 años seguía siendo el blanco de todas las burlas. Pero esa vez ante la boba mirada de los aldeanos se llevó 20 sacos de trigo y 20 de cebada.
A los 18 años trabajó 4 parcelas, el pueblo no daba crédito de lo que veía, pero una vez más, el joven Kosey cosechó justo antes de las crecidas, y con 2 de los sacos organizó una fiesta popular. Fue entonces cuando el pueblo le creyó cuando afirmaba que era el cielo y los Dioses quienes le confesaban el futuro.
La popularidad de Kosey creció y creció, pasó de ser un don nadie a ser el portavoz de los Dioses. Llegó el momento de cobrarles a los aldeanos el daño que habían echo. Había llegado el momento de venderles caros los servicios de los Dioses.
Y lo primero que Kosey pidió fue una nueva casa. Tenía que ser la mayor de todas, y sólida como un piedra.
La familia Manolo había sido una de las que más impresionadas se había quedado, y para honrar a Kosey se ofrecieron voluntarias para la gran construcción. Masika Maolo trabajó duro duante los siguientes meses.
Kosey no tardó en encontrar pareja. Neema fue conquistada con gran facilidad, y pocos meses después nació su primer hijo: Anzely
Para la siguiente crecida, el Palacio había sido terminado.
Y así es como mi tatarabuelo Kosey Arsen, se proclamó Arsen I, hijo de Ra y Faraón de Egipto.
Observaciones:
TODOS los miembros del "Spanish Civers" con un mínimo de 10 posts en su countpost, así como algún forero más que coincide con algún pbem mío, ha sido agregado a la base de datos del "Immortal Cities los niños del Nilo", así pues las 300 familias que viven en este escenario tienen TODAS nombres conocidos por todos y según el devenir del juego unas adquirirán mayor importancia que otras que nunca dejarán de ser meros cazadores recolectores o esclavos.
Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Los nombres y su situación social en el juego serán elegidas azarosamente por el ordenador.
La única familia privilegiada es la mia, la familia Arsen
Objetivo del AAR:
Mostrar el juego a medida que juego una partida, en principio serán unos pocos capítulos y cada vez la historia será mas rápida hasta el punto de ser un simple resumen.
Él era un chico preso de una situación familiar desfavorable. Sus padres construyeron su cabaña lo más alejado del pueblo. Los niños apenas le veían y cuando eso pasaba lo “bullyeaban”.
Así pues Kosey, que era como se llamaba mi abuelo, pasó su primera década persiguiendo gallinas por el campo de lino. En cuanto empezó a madurar, dejó de alborotar aves, y como la sociedad no lo aceptaba, decidió entablar amistad con la naturaleza.
Kosey pasaba muchas horas en el desierto, allí no había aldeanos cazando gacelas, porque éstas no se adentraban en él, tampoco había frutos que recoger ni agua que beber. Kosey allí era el único, Kosey era el Rey.
Tantas horas solitarias le dieron muchos pensamientos a desarrollar. Él desde lo lejos contemplaba a los crueles humanos en sus tareas cuotidianas, ellos eran fuertes pero su mente daba poco de si. Habían asentado sus poblados cerca de los campos de lino en vez de lugares abundantes en comida. Él creía que podría haber planeado mejor esas aldeas, le gustaba definir las zonas, por ejemplo llamaba Tierra Negra a la zona que el Nilo periódicamente inundaba y al retirarse dejaba teñida. Las tierras que no alcanzaba el agua las llamaba Tierra Roja, y era donde se debía asentar cualquier humano, pero habría que buscar fuentes próximas de granados, olivos y palmeras datileras, el lino sería una necesidad secundaria, y el agua se podría transportar con cerámicas adecuadas.
Se pasaba el día contemplando el valle y cuando la noche caía, a medio camino de casa había un lugar con hierba fresca donde tumbarse a contemplar las estrellas. Kosey era un soñador, dibujaba todo tipo de formas y figuras en el cielo nocturno, sin embargo no siempre podía dibujar con su estrella favorita, la más brillante de todas, un dibujo canino, ya que esa hermosa estrella sólo se dejaba ver ciertos períodos de tiempo. Durante 4 años no cayó en la cuenta de que cuando su estrella se asomaba por el horizonte, empezaban las inundaciones del Nilo. El 5º año lo corroboró, el 6º año trabajó una parcela de tierra negra y sembró trigo. El pobre Kosey fue el hazmerreír de toda la ribera del Nilo, todos sabían que cualquier día el Nilo se cobraría su tributo y Kosey moriría de hambre al no haber recolectado suficiente. Y llegó el día en que Sirius ascendió, ese día Kosey cosechó y llenó 15 sacos de trigo. El pueblo envidioso creyó en una sonrisa de la fortuna.
Las aguas bajaron, y Kosey trabajó 2 parcelas. A sus 17 años seguía siendo el blanco de todas las burlas. Pero esa vez ante la boba mirada de los aldeanos se llevó 20 sacos de trigo y 20 de cebada.
A los 18 años trabajó 4 parcelas, el pueblo no daba crédito de lo que veía, pero una vez más, el joven Kosey cosechó justo antes de las crecidas, y con 2 de los sacos organizó una fiesta popular. Fue entonces cuando el pueblo le creyó cuando afirmaba que era el cielo y los Dioses quienes le confesaban el futuro.
La popularidad de Kosey creció y creció, pasó de ser un don nadie a ser el portavoz de los Dioses. Llegó el momento de cobrarles a los aldeanos el daño que habían echo. Había llegado el momento de venderles caros los servicios de los Dioses.
Y lo primero que Kosey pidió fue una nueva casa. Tenía que ser la mayor de todas, y sólida como un piedra.
La familia Manolo había sido una de las que más impresionadas se había quedado, y para honrar a Kosey se ofrecieron voluntarias para la gran construcción. Masika Maolo trabajó duro duante los siguientes meses.
Kosey no tardó en encontrar pareja. Neema fue conquistada con gran facilidad, y pocos meses después nació su primer hijo: Anzely
Para la siguiente crecida, el Palacio había sido terminado.
Y así es como mi tatarabuelo Kosey Arsen, se proclamó Arsen I, hijo de Ra y Faraón de Egipto.
Observaciones:
TODOS los miembros del "Spanish Civers" con un mínimo de 10 posts en su countpost, así como algún forero más que coincide con algún pbem mío, ha sido agregado a la base de datos del "Immortal Cities los niños del Nilo", así pues las 300 familias que viven en este escenario tienen TODAS nombres conocidos por todos y según el devenir del juego unas adquirirán mayor importancia que otras que nunca dejarán de ser meros cazadores recolectores o esclavos.
Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Los nombres y su situación social en el juego serán elegidas azarosamente por el ordenador.
La única familia privilegiada es la mia, la familia Arsen
Objetivo del AAR:
Mostrar el juego a medida que juego una partida, en principio serán unos pocos capítulos y cada vez la historia será mas rápida hasta el punto de ser un simple resumen.
En agradecimiento te llevaré unas lindas cerámicas a tu palacio
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